¿El
cornudo debe estar mirando?
Este
es un tema controvertido. No hay ninguna respuesta contundente. Que
el marido cornudo mire tiene aspectos positivos y negativos. La
solución a tomar depende de la pareja, pero debe ser una solución
consensuada, en la que no haya ni ganador ni perdedor, sino que los
dos sean ganadores. Y debe ser una solución revisable a medida que
la experiencia es mayor. Se puede creer que algo va a ser beneficioso
en un principio y luego resultar que no.
Aspectos
positivos de que el marido cornudo mire
El cornudo tiene una experiencia sexual enormemente excitante: si bien a menudo
es difícil de entender para una esposa, los deseos cornudos del
marido son una manifestación de su sexualidad. Cuando ve a su esposa
tener relaciones sexuales con otro hombre él puede sentir que es la
mejor experiencia sexual que nunca ha tenido. Si todo va bien, el
marido puede sentir que está experimentando una especie de
excitación de cuerpo completo, una especie de orgasmo total, que ni
siquiera sabía que era posible.
Para
él es mucho más fácil revivir lo que ha ocurrido si lo ha estado
viendo. El querrá revivir esta experiencia de ver a su mujer con
otro hombre: disfrutará mucho hablando de lo ocurrido mientras
juegan en la cama, e incluso estará mucho más excitado si hablan de
ello antes de follar; podrá disfrutar de una buena masturbación, o
dos, o dos docenas, recordando lo que ha visto. Para revivir la
experiencia solo tiene que cerrar los ojos y todo volverá a aparecer
en su mente.
Cuando
folla con su mujer a ella le resultará muy fácil conseguir que
tenga grandes orgasmos. Basta con hablarle sobre lo que vio y que la
esposa añada lo que sintió, tanto si es real como si es producto de
su imaginación. Sus orgasmos serán increíblemente intensos.
En
el caso de que él tenga alguna o algunas insuficiencias sexuales,
mirar puede ayudarle a que las comprenda y las acepte. Si el marido
cornudo tiene un pene pequeño o es un mal amante en la cama, dejarlo
mirar puede permitirle que comprenda y acepte que no puede complacer
a su esposa. Esto puede llevarle a que aliente a su mujer a tener
sexo con su amante cuando ella lo desee incluso si él no puede
verlo.
Su
aprecio por la esposa se profundizará si el cornudo mira,
seguramente comprenderá que ella le está dando un regalo. Debe
quedar claro que no es su derecho mirar y que lo está dejando ver
porque lo ama y quiere que experimente su fantasía en persona.
Siempre que lo haya dejado claro, es muy probable que el cornudo
desarrolle una profunda y amorosa apreciación por su mujer porque le
ha dado este gran regalo.
Si
la esposa lo desea, dejarlo mirar puede ser una forma muy efectiva de
que el marido sea más sumiso. Esto es particularmente cierto si la
esposa tiene un auténtico macho alfa con el que joda. Si el sexo
entre ambos es muy diferente de lo que le proporciona el marido
cornudo, puede caer en un estado de sumisión al darse cuenta de que
otro hombre realmente le proporciona algo a su mujer que él no puede
hacer.
Después
de ver como practica el sexo con otro, el cornudo seguramente quiera
jugar de alguna manera. Este tipo de juego varía según la pareja. A
veces es sexo. A veces es la limpieza. A veces es la adoración del
coño. A veces es una simple paja y hacer que se corra. Cualquiera
que sea la variedad de juego, será mucho más potente si el cornudo
lo ha visto.
Los
aspectos negativos de dejar que el cornudo mire
Creo
que los aspectos positivos casi siempre superan a los posibles
negativos, pero hay algunos resultados que pueden ser desastrosos.
Esto suele suceder porque en realidad mirar es muy diferente de
simplemente fantasear con ser cornudo y puede generar respuestas
emocionales para las que el cornudo no está preparado.
Nuevamente,
estos son solo resultados potenciales. Están lejos de estar
garantizados, pero es bueno estar al tanto de lo que podría suceder
para estar mejor preparado para ello.
Su
ansiedad y celos pueden superar su deseo: es casi seguro que el
cornudo va a experimentar ansiedad y celos en algún nivel. Está
programado en su cerebro para experimentar esas cosas mientras
observa a su esposa tener relaciones sexuales con otro hombre. Eso
suele estar bien. El problema es que puede descontrolarse
rápidamente. Esto generalmente ocurre cuando las expectativas del
cornudo de lo que iba a suceder no coinciden con la realidad. El
ejemplo más simple es que él pensó que su esposa solo estaría
follando y termina sintiendo que está haciendo el amor con otro
hombre. De repente, los celos abruman su excitación y se asusta. Eso
puede ser muy problemático, especialmente si resulta en algún tipo
de altercado físico.
Es
posible que el amante no sea capaz de actuar: esto es más común de
lo que podría pensar, incluso con hombres que dicen que no tendrán
ningún problema para tener relaciones sexuales mientras el marido
mira. Lo dicen y lo dicen en serio, y luego entran a su habitación y
ven al esposo sentado allí jugando con su polla y ya no pueden
ponerse rígidos. Esto tiende a suceder con mayor frecuencia cuando
la esposa intenta conectar con su marido mientras tiene relaciones
sexuales con su amante. Si no está preparado para ello, puede
terminar sintiéndose como un accesorio en el juego perverso de la
pareja y puede desinflar su erección.
Puede
arruinar la confianza en sí mismo del marido: para muchos hombres,
su confianza está ligada directamente a su capacidad para hacer un
buen trabajo sexual. Si el esposo ve a otro hombre tener relaciones
sexuales con su mujer y es testigo de que tiene grandes orgasmos (lo
cual siempre debe ser el objetivo si va a tener relaciones sexuales
con otra persona), puede ver disminuida su confianza. En general,
este resultado puede ser mitigado por hábiles cuidados posteriores.
Puede
arruinar el encuentro. La esposa quiere tener buen sexo con su
amante. Desea experimentar un buen orgasmo. Desea disfrutar de la
emoción de estar con alguien nuevo. El esposo que está mirando
puede arruinar eso. A veces, cuando un cornudo observa, descubre que
no está yendo como se imaginaba. A veces, decide que necesita
intervenir tomando el control de una manera que no debería, o actúa
de alguna manera que traiga un final temprano de la noche porque cree
que ya es suficiente.
Podría
dañar la relación entre la pareja. Esto realmente solo sucede en
dos casos: cuando resulta que el cornudo realmente no quería que su
fantasía se hiciera realidad. También ocurre cuando la relación ya
está mal y ya hay problemas, y el acto de la puesta de cuernos es
realmente el catalizador que finalmente la destruye. Esta ruptura
tiende a desarrollarse después, y en pequeñas dosis, como si el
marido estuviera amargado por el hecho de que su mujer tuvo un gran
orgasmo con otra persona, o se está preguntando si el amante es más
guapo que él, etc.
Cómo
garantizar que la relación en la pareja cornuda funcione bien.
Hay
maneras de asegurarse de que una relación cornuda sea una gran
experiencia para el marido y para la mujer.
El
marido no debe correrse hasta que la esposa no haya terminado. Este
es un deber absoluto. A un cornudo se le puede permitir masturbarse
mientras mira, pero no puede correrse hasta que la esposa y el amante
hayan terminado. Si se corre de antemano, parte de su deseo se
debilitará y cualquier ansiedad, celos e inseguridad que esté
sintiendo son libres de ponerse en primer plano. Es justo después de
su orgasmo que las cosas se vuelvan más desordenadas. Por esa razón,
es por la que no puede correrse hasta después. Si él no puede
contenerse, hay que poner su polla en una jaulita de castidad y desbloquearlo cuando
termine la pareja (o atarlo / o esposarlo). También se puede hacer
que salga de la habitación si se corre antes de que la esposa haya
terminado.
Hay
maridos que se corren rápidamente en cuanto ven a su esposa con otro
e inmediatamente empiezan con una fase crítica sobre lo que está
ocurriendo llegando a decir que está avergonzado de haber estado tan
emocionado de que otro hombre esté follando a su mujer. En un breve
espacio de tiempo vuelve a estar excitado y animado por ver lo que
está ocurriendo, pero puede decir o hacer cosas muy desagradables
durante ese breve periodo (cinco minutos o poco mas) que hay entre su
orgasmo y volver a excitarse. ¡Además, se correrá aún mejor si
espera hasta que la pareja haya terminado!
El
cornudo y el amante se deben conocer fuera de la habitación.
El cornudo no debería encontrarse con el amante por primera vez la
noche en que lo verá tener relaciones sexuales. Deben conocerse
fuera de la casa otro día, preferiblemente unas semanas antes. El
beneficio principal de esto es que se le da al cornudo la oportunidad
de ajustar sus expectativas / fantasía. Él puede pasar unas semanas
imaginándote con esa persona en particular y hace que sea menos
probable que te tome por sorpresa de cualquier manera cuando esté
viendo como folla su mujer.
El
cornudo no debe ver la primera vez que la esposa y su amante follan.
Es posible que el
marido cornudo no esté de acuerdo con esto, pero puede ser realmente
útil de muchas maneras. Primero, la esposa y su amante pueden
encontrar su ritmo sexual sin su cornudo allí (además, pueden
averiguar si el sexo es realmente bueno). En segundo lugar, la esposa
vuelve a casa con su marido y se divierten juntos mientras le hace
saber, contándole lo que ha ocurrido, qué puede esperar cuando
finalmente pueda verlo. Esto tiene el beneficio de ayudarlo a ajustar
su fantasía antes del gran momento. Cuanto más se acerque su
fantasía a la realidad, es menos probable que se sienta decepcionado
o molesto cuando realmente suceda.
Mantenerse
sobrio. El alcohol
ayuda a reducir las inhibiciones, pero también puede tener
consecuencias muy negativas, pues también ayuda a aumentar las
emociones negativas que pueda tener el cornudo. Beber poco, sobre
todo en las primeras ocasiones ayuda a que no se produzcan
enfrentamientos desagradables.
Considerar
un hotel: dejar que
el cornudo mire en un lugar neutral puede ayudar a eliminar muchas de
las emociones que a menudo conducen al desorden. Si está viendo
tener sexo en la cama de un hotel en lugar de en la cama matrimonial,
es mucho menos probable que se sienta abrumado por la ansiedad y los
celos que se agitarán en su interior. Hay que dejar para más tarde
tener sexo en la cama matrimonial, después de que ambos tengan más
experiencia con la dinámica de cornudo y hotwife.
Hablar
con el cornudo. Si
bien para la esposa es mejor olvidarse por completo del marido y
concentrarse por completo en tener un buen sexo con su nuevo amante,
es bueno hablar al cornudo mientras está mirando. Es más efectivo
hacerlo a través de frases y conversaciones utilizando palabras
vulgares “¿Te gusta ver cómo me folla, cariño?” Es una manera
simple de hacerle saber que todavía se le está prestando atención
y que q su esposa se asegura que se está divirtiendo. A veces, eso
puede ser suficiente para evitar discusiones y enfrentamientos
desagradables.
Si
el marido quiere mirar (no todos los cornudos lo quieren hacer), se
debe buscar una manera de hacer que sea agradable para la pareja. Hay
que tener en cuenta las posibles dificultades y tomarse tiempo para
solucionarlas.
También
hay que considerar que, aunque salga mal alguna vez no ha ocurrido
nada irremediable. La pareja siempre tiene que estar dispuesta a
hablar entre ellos acerca de la experiencia que han tenido. Es la
única manera de recuperarse incluso de los resultados más
desastrosos.
Si
ambos trabajan juntos para garantizar una buena experiencia,
descubrirán que la experiencia cornuda puede hacer que su matrimonio
sea más fuerte y que su vida sexual sea más satisfactoria.