¿Por qué me excita el pensar que mi mujer tiene relaciones sexuales con otros hombres?

Por Dan Savage

        He recibido la siguiente carta:

    Soy A, un hombre bisexual, casado, de 35 años y que vive en una gran ciudad. Me gustaría saber qué está pasando en mi cabeza, con mis ideas y obsesiones de tipo sexual.

    Llevo con fantasías de con mi mujer durante años. Soy una persona creativa, y soy especialmente aficionado a la fantasía creativa en la cama, y mi pareja también disfruta de esto. Pero nueve de cada 10 veces, estoy fantaseando sobre sus malditos otros hombres, ya sea un trío cornudo conmigo mirando, o ella saliendo en citas y llegando a casa hecha un delicioso desastre. Estas fantasías dieron un giro inesperado cuando le pedí que compartiera historias sobre personas a las que folló en el pasado. Ella accedió, y todo resultó muy excitante.

Lo único desafortunado es que no tuvo muchas grandes experiencias sexuales en el pasado, por lo que no hay mucho que compartir. De todos modos, tenemos una vida sexual increíble, obviamente, y no siento vergüenza alguna por estas fantasías y que nos hacen excitarnos al recordarlas. Solo tengo curiosidad por saber por qué me excita tanto. Sé que otros tienen fantasías similares, pero parece que es anormal que me excite imaginando a mi mujer practicando sexo con otros hombres.

¿Alguna idea?

        ‘'¿Por qué soy así?' las preguntas siempre son madrigueras de conejo", dijo el Dr. David Ley, psicólogo clínico, autor e investigador sexual. "Creamos historias ricas y satisfactorias que en realidad son solo una forma de masturbación mental, sin interrupción de la masturbación, cuando la verdad es que, al menos en este punto, realmente no tenemos una idea clara de por qué las personas tienen alguna de las fantasías sexuales que tienen".

        Una explicación popular de por qué ser un cornudo podría excitar a un hombre, por qué saber que su esposa o novia había follado a otra persona (o estaba follando a otra persona frente a él) podría excitar a un hombre, fue la teoría de la "competencia de esperma". Para resumir rápidamente: un hombre que sospecha que su pareja femenina recientemente tuvo relaciones sexuales con otro macho, y cree que el semen del otro hombre podría estar "presente" dentro de ella, tendrá un orgasmo más poderoso y voluminoso cuando se aparee con su pareja femenina en un esfuerzo por "inundar" el semen de su competidor. Durante un tiempo, muchos investigadores sexuales teorizaron que los swingers masculinos y los cornudos estaban induciendo inconscientemente reacciones de competencia de esperma, es decir, estaban en ello por los orgasmos más poderosos.

    "Desafortunadamente, gran parte de la investigación sobre la competencia de espermatozoides ahora es sospechosa, debido a los fallos ocurridos al volver a replicar muchos de las experiencias que condujeron a estos hallazgos", dijo el Dr. Ley. "Así que hasta cierto punto, ahora estamos diciendo: 'Sabes, es complicado. Cada uno es diferente, y no hay respuestas simples'".

        Y ahora que hemos dicho eso, el Dr. Ley, que ha trabajado con muchas parejas de swingers, cornudos y parejas abiertas, ha notado que hay patrones que se repiten, y presenta algunas teorías alternativas propias.

        Muchos maridos tienen el deseo de relacionarse bisexualmente con otros hombres, utilizando el cuerpo de su esposa como una especie de representante, dijo el Dr. Ley. Para los hombres que son bisexuales (en mayor o menor grado) y están en una relación heterosexual, estas fantasías de ver a su mujer con otro hombre, podrían ser una forma de expresar su bisexualidad mientras se incluye a su esposa. Además, el erotismo basado en las experiencias o en el comportamiento de otras personas es a menudo un componente central en muchas fantasías. Esto va más allá del simple voyeurismo, y el comentario de A sobre el arrepentimiento de su esposa por no tener suficientes experiencias sexuales para compartir nos ofrece una pista en esta dirección. Muchos celebran que sus parejas son sexualmente desenfrenadas. A podría estar excitado por la idea de que su esposa se libere y comparta esa energía erótica sobrealimentada con otras parejas. Así hay una continuidad entre pasado, presente y futuro".

        Finalmente, A agrega al final de su carta algo que es una especie de llamada, una pista más: El poder erótico de hacer algo que es malo respecto a las expectativas normativas de nuestra cultura, nuestra religión y nuestro concepto de la familia nunca debe subestimarse. Si bien no todos se excitan con la idea de transgredir las normas sexuales o sociales, un porcentaje significativo sí que se excita. Mientras nuestras fantasías transgresoras que rompen las normas, se puedan realizar con otros adultos que consienten libremente, y no hagamos daño a terceros deberíamos preocuparnos menos por el "por qué" y más por el "cuándo", "dónde" y "cómo" conseguir más placer.

Dan Savage

¿Por qué disfrutamos del estilo de vida cornudo? Una apreciación personal

 

¿Por qué disfrutamos del estilo de vida cornudo?

 Una apreciación personal

        Es una pregunta muy difícil de responder, ya que no hay una sola respuesta. Cada uno de nosotros dará una respuesta diferente, y entre todas esas respuestas hay aspectos que son comunes a muchos de nosotros, y otros aspectos que son muy particulares.

        Pensando en mí y en mi situación lo que yo más destacaría es lo siguiente:

    Por lujuria, por mi gran deseo del placer sexual - Mi esposa es mi persona favorita en el mundo para tener relaciones sexuales. ¡Siempre he adorado su cuerpo, pero verla desde el exterior y ver cómo responde y se comporta con otra persona me da una apreciación completamente nueva y más intensa de lo sexy que es!

Por orgullo - Siempre me ha encantado cuando otros chicos abiertamente la miran con ojos de deseo, la tocan o acarician o cuando la follan. Y me he sentido orgullos incluso antes de descubrir mi fantasía cornuda. Saber que otros chicos miran a mi mujer y que sienten un gran deseo sexual hacia ella es ¡genial! Mi orgullo me dice que está buenísima, que los hombres la desean, que jode con algunos de ellos, pero a pesar de todo eso a quien prefiere es a mí. Hay hombres, con los que ha follado, que me envían fotos o videos de cuando han estado con ella, y eso es algo que agradezco muchísimo y que también me satisface muchísimo.

Por inseguridad – Puede parecer extraño, pero no puedo negar que para mí es un aspecto importante. Saber que está follando a otra persona desencadena un miedo muy arraigado en mi de ser reemplazado. No es lógico, ya que mi esposa y yo disfrutamos mucho del sexo, y tenemos una relación sólida que va mucho más allá del dormitorio, así que sé en mi cabeza que ella no se va a ir, pero tengo un historial de ser engañado, y eso ha creado una vulnerabilidad que aún perdura, aunque cada vez con menos intensidad. Ser una pareja cornuda es muy similar a tener a una pareja que te engaña sin tú saberlo, pero sospecho que verlo a través de la lente de la excitación en lugar de la del miedo es un mecanismo de defensa y de afrontar claramente el problema. En mi anterior situación de ser engañado, me excitaba mucho menos y eyaculaba al final, como por compromiso. En la actualidad me excito mucho y prefiero eyacular lo más tarde posible para disfrutar más de joder con mi mujer.

Por fantasía - Mi esposa sólo folla con hombres que conoce bien, y no tiene ningún interés en hacerlo con extraños. ¡Esta es sin duda mi mayor fantasía incumplida! Tengo pocas dudas de que si lo intentara le acabaría gustando, pero es su cuerpo y su deseo. Pensar que lo puede hacer en público, y especialmente en una situación pública o gang bang, siempre me la pone tiesa y dura.

Conocí a mi esposa más de un año antes de que algo sexual sucediera entre nosotros. La idea de que se desnudara con completos desconocidos y diera acceso completo a su cuerpo a hombres al azar cuyos nombres ni siquiera conoce, ¡es lo más erótico que puedo imaginar! No puedo explicarlo del todo, pero la idea de que tuve que invertir tanto tiempo y energía antes de que me concedieran acceso a sus placeres más íntimos, pero que otros hombres pudieran obtener esa misma intimidad física con la mujer con la que me casé, la intimidad que la sociedad dice que debe reservarse solo para su marido, solo por aparecer y follarla... eso es algo embriagador. En cierto modo, es algo que abarata el valor de mis esfuerzos y abarata mi propio valor en el proceso de seducirla. Eso es extraño. Puede ser que lo que ocurra es que eso sea mi aspecto humillante de ser cornudo.

¿Por qué algunos cornudos necesitan que les folle el macho que folla a su esposa?

 

 ¿POR QUÉ ALGUNOS CORNUDOS

 NECESITAN QUE LES FOLLE EL MACHO

 QUE FOLLA A SU ESPOSA? 

        Hay un sector de cornudos que consideran la humillación del marido por parte del macho que folla con la esposa, como algo esencial y fundamental. Para ellos la mayor humillación y el mayor placer que puede obtener la pareja está en que el macho se la meta por el culo al marido. En este artículo se muestran las ideas de ese sector de cornudos, ideas que otros cornudos no compartimos pero que es interesante y curioso conocer.

          El cornudo es esencialmente el esclavo de la esposa. Ella es su reina. Su única función es servirla y complacerla. La más importante es ayudar a su placer sexual. Dado que su pequeña polla no puede complacerla sexualmente, ella tiene amantes para ese propósito. El cornudo debe asegurarse de que su ama reciba el máximo placer sexual del macho. El fin del marido es también servir al macho corneador.

        Entonces el cornudo debe preparar al toro para que se folle a su chica. Esto significa chupar la polla del macho hasta la erección total, insertarla en su vagina a petición de ella y luego lamerle su esperma. El cornudo debe admirar y envidiar la gran polla y las bolas llenas del macho. Debe estar asombrado por su superior virilidad. Prácticamente debería adorar la polla de él.

        Para apreciar plenamente la categoría de la polla del amante, el cornudo debe aprender lo que experimenta su mujercita cuando su polla está dentro de ella. Debería conocer el poder de su polla. Entonces el cornudo necesita ser follado por el macho. Esto no es negociable. El acto del toro follándose al cornudo es también la señal definitiva de que el cornudo ha sido totalmente castrado por su mujer, es como su acto de sumisión completo.

         El cornudo necesita sentir el poder de la polla del toro. Necesita sentir sus manos masculinas en sus caderas mientras empuja. Necesita sentir al amante en su interior. Necesita sentir la polla de él bombeando su culo furiosamente mientras dispara su esperma en su interior. 

        El cornudo tiene que ser puesto en el lugar que le corresponde por el macho. No se trata de ser gay bi o heterosexual, se trata de hacer cumplir la jerarquía de la dominación. Además, la mayoría de los cornudos probablemente estén fascinados con la polla más grande del amante y les encantaría tener una experiencia más cercana a la que tienen sus esposas. Esta es también una forma de decir "gracias por follar con mi mujer" y esta manera de actuar va mucho más allá de las palabras.

        La voluntad del cornudo de someterse al macho, siempre y cuando su esposa se lo pida, es una muy buena señal de que realmente le gusta el estilo de vida cornudo. Siempre he visto la sumisión del cornudo al toro como un acto de sumisión total a su esposa y a sus deseos en el terreno sexual, sin que ello suponga que es homosexual o bisexual. El placer que siente el cornudo es un reflejo del placer que siente su esposa al verle humillado hasta el máximo extremo.

        Cuando se trata de un marido y una mujer que se aman, el santuario sagrado de su coño es la clave del matrimonio. Su coño le pertenece a su marido. Si el marido no puede satisfacer su coño, entonces ambos deben invitar a un hombre que sí lo haga. Pero ese hombre debe entender que cuando tiene relaciones sexuales con la esposa, el esposo también tiene sus necesidades. El amante necesita darse cuenta de que tiene que satisfacer tanto a la esposa como al esposo. 

        Para algunos hombres y mujeres esto podría ser una buena idea, para otros quizás es una idea exagerada, un poco extrema. Lo único que hay que preguntarse es si esto proporciona placer, de cualquier tipo, a la pareja. Si la respuesta es sí, pues adelante, no hay que tener presente ningún prejuicio ni lo que piensen los demás.

Angustia de la esposa.

 
Angustia de la esposa 

 

La angustia, la intranquilidad, la inquietud, del cornudo es común y se habla y se espera en un matrimonio cornudo.

Pero ¿Qué pasa con la esposa?

La realidad es que, al igual que su cornudo, en ocasiones también puede experimentar la “angustia de la esposa”, aunque por diferentes razones.

Tengo una gran intranquilidad cuando no estoy recibiendo suficiente polla, pues mi mente y mi cuerpo la desean intensamente. Yo soy así, me encanta tener buen sexo, tanto como sea posible, sobre todo con hombres negros que puedan darme lo que mi marido no tiene en su "caja de herramientas". Sin suficiente sexo, estoy irritable, no estoy concentrada y me siento físicamente insegura con mi marido y luego se lleva la peor parte de mi mal humor cuando esto me sucede. Es difícil para él porque normalmente soy una persona muy positiva con una personalidad uniforme y normalmente no me preocupo por las cosas. Cuando necesito que me follen, él sabe que está algo indefenso y nunca podrá satisfacer mi deseo de sexo, lo que me inquieta mucho.

En la mayoría de las ocasiones soy yo quien tiendo a causar mi propia angustia en los días previos a una cita, al pensar demasiado en las escenas con el macho que me va a joder y cómo podría relacionarse con mi marido ... y cómo me relaciono con mi marido. O dudar de mí misma de que si no seré lo suficientemente sexy, o lo suficientemente joven, o si mi piel envejecida es demasiado obvia si nos reunimos demasiado temprano en el día. ¿La iluminación será la correcta? Sin mi marido como mi número uno, todas mis dudas sobre mí misma no desaparecerían en el momento adecuado.

        A veces me preocupo de antemano si mis acciones con mis amantes durante nuestro tiempo juntos antes, durante y después de follar mantendrán a mi marido al borde de la tensión y excitación sexual, o me concentraré tanto en mi placer que cualquier interacción que tenga con mi marido será menor que nuestra verdadera conexión emocional ... lo que puede llevarle al límite, a llegar a dudar de sí mismo y cuestionar su valor para mí. Esto es lo peor. Si sucede, es involuntario, y se origina por dudar en compartir y comunicar completamente mi experiencia de ser bien follada y contarle las emociones que han estado en mi mente. 

Ha habido un par de ocasiones en las que he vuelto a casa de una cita en la que la química sexual y emocional entre mi amante y yo habían sido algo fuera de serie ... es cierto que refleja la conexión que tenemos mi marido y yo, las únicas diferencias son el color, la valentía y la talla de la polla. Es algo inesperado y una experiencia maravillosa cuando sucede, pero después puedo enredarme con el conflicto entre mi propio procesamiento y tener que explicárselo a mi marido con confianza. Puede significar que lucho con la búsqueda de las palabras correctas ... para expresar con confianza mi alegría, porque es cierto que después de todos estos años todavía tengo una pequeña preocupación de que mi marido se sienta desconectado de mí al escuchar lo que digo cuando comparto con él mi disfrute. Las palabras son importantes, pero compartir honestamente tu mente es absolutamente imprescindible para un cornudo. 

Luego están los momentos que se magnifican en energía ansiosa o nerviosa. Suceden cuando me estoy preparando para una cita y mi marido está eligiendo cuidadosamente mis atuendos de cita. Al ver varias combinaciones de medias, corpiños, colocadas sobre la cama, mi primer pensamiento es "oh no, tengo que probarme todas estas combinaciones", y me siento abrumada. Pero una vez que me pruebo la primera combinación de artículos y mi marido me hace girar como una modelo, veré esa mirada especial en sus ojos y la sonrisa que me dicen que me ve sexy, y su entusiasmo delata signos de excitación. Él dirá "ve a mirarte en el espejo" y ambos nos emocionamos por lo que sucederá unas horas más tarde.

Pero es cuando él "mima" mi coño, cuando siento una desazón, una angustia y una ansiedad que realmente se apoderan de mí. Sobre todo, cuando estoy con mis piernas abiertas para él, para que pueda dejarme el coño suave y desnudo, y luego cuando comenta cómo mi clítoris se hincha durante este tiempo y admite que la próxima persona que se acerque tanto a mí y a mi coño y disfrute de él, será mi cita.

Cuando me entra esta angustia y esta desazón he aprendido que la forma de superarla es abrir y compartir todas mis emociones con la persona más importante de mi vida: mi marido, mi esposo, mi número uno. Quiero ponerle los cuernos ... y siempre lo amaré.

Talkies: Fotos y ocurrencias divertidas.

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Aspectos positivos de la vida de los maridos cornudos

 ASPECTOS POSITIVOS DE LA VIDA DE LOS MARIDOS CORNUDOS

Que ella este con otros hombres tiene más lados positivos de los que se pueden llegar a imaginar, sin embargo, esto es algo que solo los maridos cornudos pueden saber y disfrutar.

Todas las parejas tienen sus secretos e incluso maneras de diversión, pero son las parejas cornudas las que han encontrado placer en que haya dos figuras definidas: una es el marido consentidor y la otra es la esposa que le pone los cuernos.

La esposa suele ser incitada y motivada por su marido para que se acueste con otro u otros hombres, esto le garantiza al marido que su mujer será bien satisfecha en el aspecto sexual, pero que el lado afectivo será única y exclusivamente para él.

Este es uno de los motivos porque existen tantas parejas cornudas, algunos maridos ya sea por algo físico o simplemente porque su mujer necesita mucha acción encuentran en otros el sustituto perfecto para el ámbito sexual.

Puede que otras parejas vean esto como poco apropiado, ya que tradicionalmente la sociedad occidental ha considerado que un hombre sí puede acostarse con muchas mujeres, pero, si lo hiciere una mujer se le tacharía de poco moral o incluso de fuera de los ámbitos normales de la decencia.

Sin embargo, no podemos juzgar muy a la ligera, ya que en la mayoría de los casos las parejas cornudas tienen una vida afectivamente mucho más sana que las que se encuentran bajo una relación monógama tradicional.

No estamos queriendo decir que el matrimonio cornudo sea mejor o peor que el tradicional, lo que realmente queremos dar a entender es que lo que sea bueno para la relación entre los dos miembros de la pareja, es lo perfecto para esa pareja, sin importar que sea socialmente aceptable.

Uno de los aspectos más positivo de los maridos cornudos es la complicidad que se crea entre el marido consentidor y su mujer.

Muchos de los hombres que viven y disfrutan de este estilo de vida, están profundamente enamorados de sus parejas y no solo eso, sino que también tienen una vida afectiva y social muy sana.

Entonces ¿por qué complicarte la vida si ella tiene relaciones sexuales con otros? Si ella acepta cumplir una de las más altas fantasías de su marido, éste es un hombre afortunado. Solo se debe tener en cuenta algo, una vez cruzada la línea es muy difícil que haya un punto de retorno.

Puede que en algunos casos haya un pacto sobre el número de veces en que ella se va con otros, pero es muy importante tener presente que al cruzar la línea muchas veces se va a más y no al contrario.

Debemos tener en cuenta que el 99% de los casos de relaciones cornudas no se dan a causa de engaños o insatisfacciones dentro de la pareja, al contrario este tipo de vida es un pacto de confianza, comprensión e incluso la satisfacción de compartir las fantasías.

El ser humano ama la diversidad y el marido que disfruta con que su mujer tenga sexo con otros hombres ya que así fortalecerá su relación de pareja y no solo la alejara de las infidelidades, sino, que será una relación mucho más fuerte pues serán uno, ya que para ellos no hay secretos y comparten todo.

Los maridos cornudos tienen en la relación con su esposa muchos aspectos positivos y posiblemente el más fuerte sea la admiración y el respeto que su mujer siente por él cada vez que deciden que va a tener sexo con otro. Una pareja unida siempre es mucho más fuerte que una que hace lo mismo, pero a las espaldas.

¿Por qué quiero que mi esposa folle con otro hombre? (6)

 

¿Por qué quiero que mi esposa folle con 

otro hombre? (6)

        Porque es emocionante. Cuando veo como está follando con otro hombre siento una mezcla de sensaciones y emociones a veces contradictorias. Me corro varias veces de solo mirar, sin necesidad de tocarme. Quiero que se la meta más y quiero que terminen de una vez pues pienso que le va a dar algo por el orgasmo continuado que está teniendo. Siento celos de como se abrazan y él aprieta su culo contra ella para que la polla le entre más.

        Muchas veces tengo una sensación en la boca del estómago, como una punzada de excitación mezclada con envidia, mezclada con miedo, mezclada con un sentimiento altamente erótico.

        Cuando veo la polla rígida del otro entrar en su coño siento una excitación increíble a la vez que sentimientos de celos. Cuando estoy viendo la serie de pollazos hondos y profundos que le da al macho no estoy seguro de si quiero que se detenga o que continúe para siempre. La emoción es increíble, al igual que la excitación, pero algunos veces no tengo la polla bien tiesa ni bien dura.

        En esos momentos no estoy seguro de lo que estoy sintiendo, excepto que es muy poderoso. Lamento que hubiéramos decidido hacer esto y no podamos volver a la situación anterior, pero al mismo tiempo siento emoción por hacerlo una y otra vez, ganas increíbles de unirme y poner mi polla en su boca, e incertidumbre de cómo proceder. ¡Un batiburrillo de emociones!

        Luego, cuando mi esposa recuerda conmigo el grosor de la polla que se ha metido y el sabor de su semen (le gusta tragarlo) vuelvo a sentir ese revoltijo de sensaciones. A mi, al principio me costó un poco integrar todos los sentimientos de celos, excitación, pérdida, ganancia, miedo, erotismo, dolor y placer que experimentaba. Las cosas han sido similares, pero menos sorprendentes y menos intensas, a medida que hemos ido teniendo más experiencia. No estoy seguro, pero realmente creo que es la gama de emociones, desde los celos y el dolor hasta el placer y la excitación sexual masiva, lo que hace, para mí, verla con otro hombre tan increíblemente excitante y agradable.

        Poder canalizar el poder latente de los celos (la envidia, el miedo a ser excluido, el miedo a no ser lo suficientemente bueno) en nuestra experiencia erótica tan intensa es lo que nos mantiene (al menos a ¡¡¡Mí!!!) entusiasmados con el estilo de vida y seguir buscando oportunidades para jugar una y otra vez.

        Nunca me he sentido realmente mal, ni la primera vez ni las veces siguientes. Yo no he notado nunca nada que indique que nuestro matrimonio empieza a ir mal. Para los dos esto es un disfrute sexual extraordinario. Y nada más.

        Todo lo anterior lo escribí hace casi cuatro años, pero las cosas cambian y las relaciones evolucionan en este estilo de vida. En realidad, las cosas nuevas son las que lo mantiene emocionante. Las vueltas, las subidas, las bajadas hacen que la experiencia sea lo que es. Así que, después de cuatro años seguimos haciéndolo porque nos emociona a los dos que ella juegue, que conozca a nuevos hombres, que tenga encuentros y experiencias sexuales. Tener esas relaciones la excita. Nos mantiene emocionados y hay muy pocos momentos aburridos. No es que ella lo haga por mí o que yo lo haga por ella. A ella le encanta tener sexo con una variedad de hombres y a mí me encanta que tenga sexo con una variedad de hombres. Tan simple como eso.