viernes, 21 de febrero de 2025

viernes, 14 de febrero de 2025

¡Alimentando la curiosidad de un cornudo!

 

¡alimentando la curiosidad de un cornudo!

    En un foro de cornudos, una esposa contó que estaba preocupada de que su esposo tuviera motivos ocultos (bisexualidad) para compartirla y animarla a que se acostase con otros hombres, ya que le hacia muchas preguntas sobre los genitales de sus amantes: cómo era de larga su polla, si era más gruesa que la suya, si los testículos colgaban o estaban muy pegados a la polla, etc.

    En algunas ocasiones sí que sucede que un marido, bisexual u homosexual que siempre ha estado en el armario, quiera que su mujer tenga relaciones con otros para así tener contactos sexuales con ellos. Pero esto ocurre en pocos casos.

    Esta mujer se sentía bastante incómoda de proporcionarle tantos detalles a su marido, pero esta incomodidad, en un principio, es bastante corriente, ya que las mujeres no están acostumbradas a hablar con hombres de la polla y los huevos de estos. Además, la mayoría de esposas temen herir los sentimientos y la confianza en sí mismos de sus maridos, si son honestas.

    Cualquier mujer que tenga marido o prometido, puede estar totalmente segura de que esta curiosidad es 100% normal. Yo diría que bastante saludable. Los maridos cornudos están obsesionados con el símbolo más obvio de la cornudez: la polla que le meten a su esposa.

    Como marido cornudo, tengo que reconocer, que cuando mi mujer empezó a traer a uno de sus amantes a casa las tardes y noches de los fines de semana, éste me dijo que le parecía que le miraba mucho la polla fuera de los momentos en que estaba jodiendo con mi esposa. Me reí y le dije que era como escuchar historias de fantasmas y poder verlos por mi mismo.

    Un marido cornudo necesita saber todo lo que pueda sobre los hombres que están con su mujer, pues sus pensamientos están completamente obsesionados con la esposa y con su macho la mayor parte del tiempo, pero especialmente durante las citas. Durante ese tiempo, la imaginación del marido intenta llenar los espacios en blanco que sus propios ojos aún no han visto y cuantos más detalles tenga, más fácil podrá hacerlo y, lo que es más importante, se sentirá incluido.

    Ninguna esposa tiene que sentirse culpable por el inevitable efecto de burla y humillación, cuando le dice a su esposo que la polla de su novio es más larga o más gorda que la suya: él quiere escuchar eso y espera escuchar eso. Incluso si ha visto esa polla, todavía quiere que su mujer se lo diga. Cuando un marido no obtiene respuestas por parte de su mujer, es muy probable que sienta que se le están guardando secretos, y el dolor que puede sentir por ello supera con creces la incomodidad fugaz de una comparación entre su polla y la del macho que da placer a su esposa y también a él.

jueves, 6 de febrero de 2025

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He tenido el secreto deseo de compartir a mi mujer desde hace mucho tiempo, pero nunca se lo he dicho, me da miedo hablar de eso con ella. Somos de un país musulmán, aunque no somos practicantes de ninguna religión y desde que éramos jovencitos vivimos en Francia. Ahora yo tengo 46 años y ella 41 y no tenemos hijos.

En nuestro país y en nuestra cultura ese es un tema prohibido y quizá por eso nunca le dije nada.

Hace poco leí una publicación sobre Cap Agde, en Francia. Un lugar donde van muchas parejas cornudas y swingers. Entonces pensé cómo iniciar el tema con mi esposa. Una noche abrí la caja de Pandora.

Estábamos ya en la cama y nos pusimos a jugar.  Comenzamos a besarnos. Me armé de valor y le pregunté cuál era su fantasía sexual. Ella es tímida y me dice que yo le diga primero cual es la mía.

Yo le susurré:

  • Quiero ir a una playa nudista contigo. ¿Quieres venir conmigo?

Me miró a los ojos y dijo:

  • Sí.  Pero desnuda del todo no, solo en topless.

Vi en sus ojos que realmente lo quería.

  • ¿Pero no te pondrás celoso cuando los hombres miren mis tetas?

  • No. Estaré orgulloso de ti porque tienes un pecho precioso. 

Mi polla se endureció mientras hablábamos. Ella se dio cuenta y dijo:

  • Querido, se te ha puesto dura. ¿De verdad quieres que muestre mis tetas en la playa? 

  • Sí.

Ella me sonrió. Y comenzó a besarme profundamente en la boca. Puse mi mano sobre los labios de su coño. Estaba chorreando. Puse mi polla en su coño y ella lanzó un pequeño gemido. Sé que a ella le gusta. 

Ella preguntó:

  • ¿Quieres que solo esté tumbada en la playa o que también pasee?

  • Quiero que paseemos por la playa agarrados de la mano. Quiero que todos vean que somos pareja y que tengo la suerte de tener una esposa con hermosas tetas. ¿Lo harías por mí?

  • Sí, caminaré contigo en topless en la playa.

Cuando dijo esto, no pude contenerme y me corrí. Ella todavía no se había corrido, así que le dije:

  • Lo siento querida, no me he podido aguantar.

  •  No hay problema, está bien. ¡No sabía que esto te excitaba tanto! ¡Es interesante saberlo!

Se levantó y fue al baño. 

Al cabo de unos minutos necesitaba orinar, así que me levanté y caminé hacia el baño. Abrí la puerta ligeramente pero no entré porque escuché unos gemidos. Miré y vi a mi esposa. Ella estaba con una mano en el coño tocándose y gimiendo. Esperé mientras la escuchaba. Los gemidos se hicieron más seguidos y se corrió.

Regresé a la cama. Al cabo de unos minutos ella vino, se metió en la cama y me besó, luego me dio las buenas noches y me abrazó. No dije nada, pero ahora sé que a ella le gusta ir en topless, es un gran paso para mí.



Mi deseo sexual.

  MI DESEO SEXUAL Confesiones de una esposa ardiente, de  una hotwife.           Amo a mi esposo profundamente y con todo mi corazón. Nunca ...