IMÁGENES COMENTADAS
Después de horas de estar intensamente jodiendo y teniendo relaciones sexuales de todo tipo, mi esposa yace en la cama al lado de un amante negro bien dotado.
Mientras están así, relajándose, hacen un chiste a mi costa, y se ríen de mi pequeña polla blanca. En cuestión de minutos, su amante vuelve a tener la polla dura, lista para regar otra vez el coño de mi mujercita. ¿Cómo no le va a gustar esta vida a mi mujer?
Cuando nos vamos de vacaciones sexuales mi esposa aprovecha bien el tiempo. Utiliza tangas muy pequeños que rápido atraen la atención de los chicos que hay en “nuestras playas”. En cuanto la veo que empieza a mirar a determinado chico y a sonreírle, la digo que me voy a tomar un café. Cuando vuelvo suelo ver algo así. Después de que se bañen durante un buen rato nos vamos al hotel, y allí se toma una buena ración de leche de polla negra, que es de las que más le gusta. Luego se toma una buena ración de leche de mi polla blanca, que no parece que le desagrada.
Cuando mi mujercita sale por la noche, bien sea con las amigas o con algún amigo, mi polla está toda la noche de guardia. No logro conciliar el sueño pensando en lo que posiblemente esté haciendo. Si llega bastante tarde o por la mañana del día siguiente, normalmente tengo un buen dolor de huevos y a veces hasta en la polla. No me gusta meneármela para poder metérsela bien a ella cuando llegue a casa y me cuente las travesuras que ha hecho.
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