IMAGENES

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A veces creemos que somos los únicos, o alguno de los pocos, que jodemos de determinada manera con nuestra mujer.

Cuando ella ha estado jodiendo con su amante y viene conmigo, siempre tiene el coño muy dilatado.

Yo, en esos momentos, la tengo superdura y supertiesa y, en cuanto se abre de piernas y me pongo en posición, mi polla va derechita, sin tener que agarrármela y guiarla, o que la agarre ella y se la lleve a la entrada de su coño.

Me aproximo despacio, para ir saboreando bien el momento que enseguida va a llegar, y para putearla un poco, ya que ahora tiene muchas ganas de que sea yo el que se la meta, y que tarde un poquito en hacerlo, jugueteo de una forma que le fastidia bastante.

Rozo con la punta del capullo la entrada. Tiene el coño baboso, delicioso. Juego a hacer como que se la meto y, metiendo solo la puntita, la vuelvo a sacar. Y esto lo hago unas pocas de veces, hasta cuatro o cinco. Ella se mueve levantando toda la zona púbica en un intento de que la entre. Pero no lo consigue. Entonces al tiempo que siente mi polla en su entrada hace dos cosas: lo vuelve a levantar y agarra mis nalgas y las aprieta contra sí.

Muchas veces consigue que no me vuelva a retirar, pero para hacer que desee mi polla con más ganas, se la voy metiendo muy despacito al tiempo que me voy moviendo hacia delante y hacia atrás. Al final consigue tenerla toda dentro y sentir como mis cojones pegan en los bordes de su coño.

Y todo esto que yo creía que hacía en exclusiva, resulta que lo veo en internet. Es toda la secuencia de imágenes que acompañan este escrito.