Solo me gusta mirar
Realmente me excito solo viendo a mi esposa con otro hombre. Todo comenzó poco después de que nos casáramos cuando ella me dijo que se masturbaba mientras fantaseaba que otros hombres la estaban follando.
Escuchar esto realmente me excitó, y eso me extrañó, pues yo solía ser un tipo celoso. Después de hablar de ello durante algún tiempo, decidimos probarlo.
Comenzamos con un vecino que conocíamos bien y mi esposa encontró atractivo, a pesar de que teníamos 26 años y él tenía 40. Fue una gran experiencia ya que fue muy considerado, además de un buen amante. Su polla era del mismo largo que la mía, pero mucho más gruesa. Desde ese episodio inicial, me enganché a mirarla con los hombres con los que ella ha querido acostarse.
Cuando miro lo hago en silencio, generalmente sentado en las sombras. Me encanta ver sus juegos previos, con muchos besos, caricias y desvestirse antes de ir a la habitación.
Disfruto especialmente cuando veo desaparecer la mano de su amante, ya sea dentro de su blusa o debajo de su falda; mi mente gira y gira preguntándome qué estarán haciendo sus dedos.
A menudo me quedo afuera y miro por la puerta ya que no quiero molestarlos. Me encanta escuchar sus gemidos y sus charlas desde fuera de la habitación ... es más íntimo para ellos cuando no estoy allí.
Casi siempre se ríen y hablan en voz baja, lo que no me humilla en absoluto, sino que me excita muchísimo. Todo esto lo oigo perfectamente ya que tenemos un monitor de bebé. Esto permite que su amante se exprese más abiertamente, así que escucho cosas que no habría oído si hubiera estado allí.
Escuchar sus amores es más intenso de lo que puedo explicar, una mezcla de dolor y placer que hace latir mi corazón fuertemente.
No me masturbo ni expongo mi polla; todo parece estar en mi cabeza.
Estoy más excitado cuando sé que realmente le gusta el hombre, así que para mí no solo es verlos follar por lo que disfruto. Mi entusiasmo principal viene de ver y escuchar el placer de mi esposa, si ella ama el sexo que él le da y lo muestra, entonces todavía disfruto más de verlo.
Cuando él ha terminado de satisfacerla es cuando ocupo mi sitio. Ella y yo nos ponemos en posición y jodemos. Ahí sí que disfrutamos los dos, el uno del otro y el uno con el otro.
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