TALKIES
Este es un blog que pretende recoger los múltiples puntos de vista y opiniones que dan y tienen las diversas personas que sus actividades sexuales se desarrollan en el mundo de los cornudos
¿POR QUE QUIERO QUE HAGA ESO?
Esta es la pregunta del millón en el mundo de los cuernos. Hay varias teorías, varias explicaciones, pero lo que es válido para un hombre no lo es para otro que está en una situación similar.
Se exponen tres escritos de otros tantos hombres. Los dos primeros expresan la incomprensión de sus propios deseos. En el tercero se expone una respuesta que puede ser convincente y válida para algunas situaciones, para otras no.
Simplemente no puedo entenderlo. Se cría a un hombre para luchar, para conquistar, luego para proteger y defender a tu esposa o novia de algún otro tipo que la quiera para él. Y aunque no quiero que eso suceda, no quiero nada más que dejarla disfrutar, quiero que desee estar follando con otro chico. Me encanta verla excitada y coquetear con otro hombre. Ella ahora ha aceptado esta fantasía y está muy excitada, incluso más que yo. Incluso tiene pensado con quien va a coquetear. Y me encanta. Nada me emociona o excita más. Sin duda, van a terminar juntos en la cama. ¿Por qué es esto tan hipnótico y paralizante? ¿Por qué quiero que esto suceda? No es un deseo normal. Y tiene un poco de riesgo. Pero no me importa. Voy a dejar que suceda. Ojalá pudiera entender la locura que hay detrás de esto.
Entiendo completamente su confusión. Mi esposa y yo hemos estado en este estilo de vida durante más de 30 años y todavía no tengo idea de por qué tengo tanta excitación de que ella tenga relaciones sexuales con otro chico. Estábamos comprometidos y viviendo juntos cuando descubrí que ella estaba follando con un buen amigo mío. Estaba muy confundido. Sabía que debería haber estado furioso de celos, pero en cambio la idea de que ella follara con mi amigo era una de las excitaciones más intensas que jamás había experimentado.
Como todos los demás, nuestra relación se basa en nuestro amor mutuo, pero el amor no es lo mismo que el sexo. No equiparamos el sexo con el amor y para nosotros los dos pueden ser mutuamente excluyentes. El sexo se centra en la intimidad, pero creemos que la intimidad puede ser emocional o física. Para nosotros, para ser emocionalmente íntimos tenemos que estar enamorados de esa persona. Esta intimidad emocional es algo que solo compartimos entre nosotros. Sin embargo, creemos que puedes compartir una intimidad física con cualquier persona que elijas. Entonces, ¿por qué tenemos sexo con otras personas? No se trata de obtener algo que no obtenemos uno de otro. De hecho, es la sensación de plenitud que obtenemos uno de otro lo que nos permite pensar en el sexo con los demás.
Una de las diferencias en nuestro matrimonio es que hemos sido capaces de llevar el sexo a otro nivel. Que ambos podemos tener otras parejas sexuales y no sentirnos amenazados por ello. Creemos que si faltara algo, y estuviéramos buscando a otras personas para llenar ese vacío, entonces eso sería un problema. Vemos tener relaciones sexuales con otra persona como otro aspecto de nuestra vida sexual en general. Sin embargo, no le damos ningún valor más allá de eso. Siempre hemos dicho que el sexo con otras personas debe ser para añadir o mejorar nuestra vida sexual y así ha sido. Cuando tenemos relaciones sexuales con otras personas, solo nos divertimos. Sentimos que las "aventuras" que hemos tenido con los demás han sido todo acerca de tener "diversión sexual". Queremos complacernos mutuamente y vernos complacidos por los demás. Si tenemos un capricho que involucra sexo con otra persona, entonces todos estamos a favor. Sabemos cuál es nuestro amor, cuán fuerte es y cuán sólido es nuestro matrimonio, y esto nos da la libertad que necesitamos para hacerlo. Tenemos fe completa y confianza el uno en el otro y nunca nos sentimos amenazados por los demás.
Cuando estamos con otras personas, el sexo satisface deseos, cumple una fantasía y se utiliza para explorar ideas eróticas. Habiendo dicho todo eso en cuanto a de dónde "nosotros" venimos, entiendo lo que estás diciendo solo que no veo el deseo de ver a la esposa con otros como una locura o no normal. Supongo que diría que es una aventura erótica y tengo que experimentar el privilegio de ver a la esposa complacida por otros hombres y el poder de su sexualidad. Siento que he crecido como hombre, amante, compañero, esposo. Mi mente se ha abierto para experimentar cosas nuevas y explorar mi lado sexual que de otra manera no tendría. Sin arrepentimientos.
El tema de ver y saber que nuestros padres son una pareja cornuda rara vez se aborda. A mí es un tema que me apasiona y he buscado experiencias de otros cornudos sobre el tema. Y lo he hecho porque creo que, ver a mi madre con otro hombre, y a mi padre allí mirando, ha tenido muchísima influencia en mi vida como cornudo.
He decidido compartir mi experiencia y algún que otro detalle de otras experiencias que he podido recopilar de distintos blogs y foros y me han parecido interesantes.
La primera vez que pille a mi madre tenía 14 años. Me había puesto malo en el cole y me mandaron a casa. Entré por la puerta trasera. Escuché algunos ruidos provenientes del dormitorio y fui hacia allá. Cuando llegué a la puerta, me quedé absolutamente estupefacto. Allí estaba mi mamá con un hombre negro muy grande, que tenía una enorme polla que sacaba y metía del coño de mi madre. a un ritmo lento, pero constante.
Me volví hacia el pasillo. Estaba temblando como una hoja. Nunca había visto algo así antes. No me atreví a volver atrás y ‘mirar’, porque tenía miedo de que me viesen y no sabía bien si me castigarían o no, pero imaginaba que no les gustaría que les hubiese estado viendo. Me volví al garaje y me quedé allí, hasta que fue la hora en que normalmente regresaba de la escuela. Mamá, no me dijo nada. Yo no sabía qué hacer ni qué decir. Estaba bastante confundido así que opté por comportarme como si no hubiese visto nada. Tenía la duda de si mi padre lo sabía. Algunas semanas más tarde empecé a comprender todo.
Un viernes por la noche me despertó un ruido y me levanté para ver que era. Vi a mi madre desnuda, besándose y acariciándose con un hombre negro que también estaba desnudo. Enseguida pensé que estaba engañando a mi padre, pero en esos instantes él apareció también desnudo y se unió a ellos.
Me di cuenta de que mi mamá estaba teniendo sexo con diversos hombres, pues este no era el hombre con la que la vi la primera vez, además de con mi padre.
De vez en cuando mis padres recibían a un amigo los viernes. Eran cuatro o cinco amigos que se turnaban en las visitas de los viernes a nuestra casa.
Cada vez que venía un amigo de mis padres un viernes por la noche, yo hacía con que me dormía y cuando escuchaba ruidos o risitas me levantaba silenciosamente para ver lo que ocurría. Casi siempre era muy parecido: mi mamá se desnudaba, el amigo y mi padre la daban un buen sobo, ella chupaba una o ambas pollas, a ella le lamían el coño y el invitado solía ser el que primero jodía a mi mamá.
A veces ella se tumbaba boca abajo, sobre el otro hombre, y mi padre guiaba la polla del otro hasta la entrada del coño. Luego, el invitado empujaba lentamente hasta metérsela toda entera. Mi madre emitía unos quejidos de placer que, al principio, me parecían increíbles. Cada vez que hay “una reunión” acabo con dolor de polla.
Mi mamá estaba teniendo sexo con más de un hombre, pero eso no era ilegal. A ella nunca la forzaron ni la obligaron a joder con otros hombres. Ella se divertía y papá también. Los dos estaban felices, y yo crecí en un hogar sin problemas.
Si no fuera por la felicidad que esos hombres le dieron a mamá, ella podría haber dejado un día a papá y separarse. Ella estaba feliz, así que hizo feliz a papá, lo que propició que yo viviese en un ambiente muy agradable. Ahora que soy un adulto y pienso en mi adolescencia y juventud, creo que tuve suerte de que mis padres fueran una pareja cornuda.
Todo esto me excitó muchísimo. Cuando tuve novia le hablé de todo lo que yo había vivido. Ella se excitaba mucho con lo que oia y empezamos a practicarlo poco a poco. Ahora tenemos tres hijos y la he seguido compartiendo todo el tiempo desde que nos casamos. Ella sigue cuidándose mucho y está buenísima.
La mayoría de los hombres, aunque no todos, han sido negros. De hecho, la frecuencia con la que compartimos ha aumentado, ¡esta afición a los cuernos es muy adictiva!
EL EMPUJE DE UNA POLLA GRANDE Y EL CONSECUENTE GEMIDO
Mi mujer se va a acostar con un chico que acabamos de conocer. Ni ella ni yo sabemos lo que él tiene entre las piernas. Hablamos y yo me quedo en la misma habitación o en la de al lado, En cualquiera de los dos lugres puedo escuchar el gemido fuerte de mi mujer cuando él da el primer empuje y los gemidos con cada uno de los empujes sucesivos a medida que se la mete entera.
A continuación, se relatan las experiencias de mi mujer con algunas pollas.
Cuando estoy mirando nunca me quedo todo el tiempo. Me gusta ver la cabeza de su polla dura penetrar en su raja y los momentos que siguen hasta que él llega con sus bolas hasta el mismo borde. Una vez que ella consigue tener dentro esa polla gruesa, que hace que esté en otro mundo, los dejo solos a menos que me llamen.
No tengo nada que imaginar; ¡He escuchado ese "gemido del primer empuje" muchas, muchas veces! Siempre es estupendo, siempre me gusta, bien sea que esté mirando, o de pie fuera de la puerta, o acostado en el dormitorio de invitados. ¿Que encuentro aún más excitante? ¡Sus gemidos y jadeos de placer, en su último orgasmo, cuando él la llena el coño con su semen caliente!
Disfruto mucho escuchándola jadear mientras le empieza a entrar la polla la primera vez. Es como si no se hubiera dado cuenta, al verla, de lo grande que es, y solo lo perciba con su coño cuando empieza a deslizarse dentro de ella la primera vez.
Cuando una polla grande y gorda consigue meterse hasta las bolas dentro de mi esposa, ella aúlla como el silbato en una vieja locomotora de vapor: ¡¡¡Whooo, whoo, whoo, whooo!!! Entonces la cama comienza a golpear contra la pared y toda la casa comienza a temblar.
Una de las ocasiones que no se me olvida fue cuando Mari estaba con un chico con una polla extra ancha. Él la estaba volviendo absolutamente loca. Después de sólo unos minutos ella tuvo un orgasmo, él la sacó, descansó unos minutos y comenzaron de nuevo. Ella se puso en posición de perrito, lógicamente el chico se puso detrás de ella, le metió rápido la polla entera y la sostuvo allí metida profundamente. Ella maldijo y soltó un fuerte gemido. Él no se movió ni un centímetro, simplemente la agarró de las caderas y se mantuvo totalmente pegado a ella, que rápidamente tuvo otro tembloroso orgasmo. Mari golpeó su puño contra el colchón como si estuviera enojada consigo misma. Ella dijo "lo siento.... No sé qué me pasa". El tipo sonrió mientras mi hermosa esposa se disculpó con él por tener tantos orgasmos. Había dado con una polla perfecta para su coño. Se la metió otra vez y por fin los dos tuvieron un orgasmo casi al mismo tiempo.
Un tipo con una cabeza de polla gruesa, la estuvo frotando contra su coño durante bastante tiempo. Ella le estaba diciendo lo mucho que le gustaban los chicos con pollas muy grandes, pero él no se la metía, ella le pidió que lo hiciera. Empujó un poco, solo le metió toda la cabeza y ella exhaló un largo y fuerte ¡ooohhh! El tipo era muy bueno, tenía mucha experiencia y sabía sacarle provecho a su polla. Se dejó de mover, pero dejó metida la cabeza de la polla en el coño. Se inclinó hacia atrás, pero sin sacarla ni un milímetro y ella comenzó a mover y levantar sus piernas y cadera hacia arriba y hacia abajo en lo que me pareció un intento desesperado por conseguir que la entrase más. Dejó caer sus piernas. Estoy seguro de que ella estaba muy mojada y él acabó por metérsela toda. Ella gritó y gritó diciendo una y otra vez ¡oh dios! ¡oh dios! Cuando este hombre se fue me comentó que en esos momentos lo había pasado fabuloso.
Nunca sabemos qué esperar cuando tratamos con alguien nuevo. Normalmente, estoy en la habitación cómodamente mirando desde una silla. Por lo general, él se desnuda con la espalda hacia mí mientras ella espera en la cama. Casi nunca veo su polla. Sé si es algo especial por la mirada y la cara que pone cuando la ve ya cerca.
IMÁGENES COMENTADAS
El pene, cuando está erecto, ha sido un símbolo de virilidad, de fertilidad y de poder durante miles de años y en diferentes culturas. Cuando una mujer, está en público, con un hombre que tiene la polla tiesa, está diciendo públicamente que ese hombre es su macho alfa.
Es muy probable que haya sido el marido cornudo el que ha hecho la foto a su mujer y a su novio, pues entiende bien que su esposa esté orgullosa con la polla de su novio. Y además, él, como marido cornudo también lo esté por lo que significa para su matrimonio.
La mayoría de los maridos cornudos sienten una cierta fascinación por la polla del novio de su mujer. Fascinación que no tiene nada que ver con un interés bisexual u homosexual.
Lo mostrado en la foto tiene un cierto erotismo, para la mayoría de las personas, por la desnudez y la jodida implícita de la que disfrutarán la pareja más tarde. Pero para el marido también será una gran disfrute ver el revolcón de su mujer con su novio.
Adorar significa reverenciar o rendir culto a un ser o a un objeto que se considera superior. Una reverencia es una acción en la que una persona inclina su cuerpo o una parte del mismo en señal de saludo respetuoso por alguien o por algo.
La mayoría de los cornudos consideramos que la polla del novio de nuestra mujer es algo superior, es un objeto de estima, y la reverenciamos
El hecho de que un marido hombre esponje y limpie la polla de un macho, parece mostrar un respeto o admiración hacia ella. En mi opinión, el chupar la polla antes de que se la meta a la esposa y limpiarla una vez que la ha sacado, se parece más a un acto de adoración que a un acto sexual.