O
SEXO TRADICIONAL O SEXO VERGONZOSO DE ZORRA O PUTA
Nuestra
cultura tiene una relación muy ambivalente con la sexualidad de las
mujeres. Aunque las mujeres en contextos sexuales están en todas
partes, en la televisión, en las películas, en los medios de
comunicación, etc. todavía existe la idea de que las mujeres
pueden ser insultadas, pueden perder el respeto o el estatus que
poseen por tener demasiado sexo, por ser demasiado zorras o demasiado
putas.
"Zorra
o puta " son palabras que en este contexto, significan
básicamente que "tienen o practican mucho sexo, a veces con más
de una persona en el mismo período". La mayoría de las mujeres
se avergüenzan de que las llamen putas o zorras. Aunque a los
hombres a veces se les llama putos hoy en día, generalmente es una
etiqueta que no tiene el mismo carácter despectivo. Los hombres
pueden ser un “poco guarros”, especialmente si son
indiscriminados en sus conquistas, pero esa etiqueta viene con la
implicación de que hay cierto respeto porque eso supone que son muy
viriles. Por lo general, muchos hombres no dudan en compartir con
cuántas personas se han acostado, mientras que es común que las
mujeres sientan cierta reticencia o vergüenza en andar manifestando
o hablando de su número.
¿Cómo
afecta esto a la percepción de las mujeres que viven un matrimonio
cornudo o una relación abierta por parte del resto de la sociedad y
también por parte de las personas que también se encuentran en esa
situación?
Primero,
muchas personas que viven una relación “normal”, de sexo
solamente con la pareja, colocan la etiqueta de "puta" o
“zorra”, al menos mentalmente, cuando se mencionan relaciones
abiertas, o intercambio de parejas o el poliamor. La primera
suposición es que esa mujer es una gran puta y no puede controlarlo,
así que esa es la forma de cumplir con ese impulso. Y eso es algo
malo en su mente. Parece haber una suposición subyacente, de que a
muchos de nosotros nos gustaría acostarnos con otras muchas
personas, pero renunciamos a eso para tener una relación feliz,
estable y a largo plazo.
Puedes
tener uno u otro: mucho sexo divertido o una relación responsable y
estable, pero no puedes tener ambos. Las personas que están abiertas
desafían esa idea, y eso es amenazante. Parece haber una creencia de
que tendremos que pagar por tener nuestro pastel y comerlo también,
eventualmente. Muchas personas también hacen la asociación de que
cachonda es lo mismo que guarra, y eso se aplica a las relaciones
abiertas. Algunos hacen la suposición inmediata de que las personas
en relaciones abiertas duermen mucho, obviamente con múltiples
parejas, y que ser puta es de guarras, que está mal. A veces hay
una respuesta que es una expresión de repugnancia, de rechazo, como
de asco. Algunas personas tienen el estereotipo de que los
matrimonios cornudos o los que hacen intercambio de parejas, son un
poco guarros, desagradables y tal vez infectados con algo.
Sin
embargo, un resultado contrario a la intuición de estas actitudes
anti-sexo es cuando se habla del poliamor, de muchos amores. ¡Así
que se trata de amor! ¡No solo sexo sucio! Entonces algunas personas
suavizan al concepto y le dan más credibilidad, ya que está
divorciado del puro sexo. Se pueden amar a varias personas y no
necesariamente tener mucho sexo con muchas personas. No como esos
“swingers” viciosos que follan cada vez que pueden.
Y
eso me lleva al efecto de la negatividad sexual dentro
de la
comunidad abierta, liberal
sexualmente.
Definitivamente hay un segmento de la comunidad poliamorosa que
desprecia las relaciones abiertas solo por sexo y al
swinging como el
más
repugnante
o menos válido o menos respetable porque se trata principalmente de
sexo. Estas
personas, autollamadas poliamorosas tienen
el lema: "No se trata solo del sexo". Muchos sitios web de
poliamor
tienen cuidado de tener en cuenta que no se trata solo de sexo con un
grupo de personas al azar, distanciándose cuidadosamente de aquellas
personas que solo están en él por placer momentáneo, como si eso
fuera algo malo.
Creo
que esto
es
un error . En primer lugar, refuerza la creencia cultural negativa
del sexo, de que el sexo por sí mismo es sucio y malo. En segundo
lugar, aunque el poliamor
no se trata solo de sexo con múltiples parejas, hasta
cierto punto se
trata
de eso, y negando
esto
se
niega
uno de los grandes beneficios y una parte importante de lo que somos
como personas. Sí, las múltiples relaciones emocionales
comprometidas también son geniales, pero seamos realistas que si eso
es todo lo que se
quiere,
se
pueden
hacer buenos amigos sin
necesidad de que haya relaciones sexuales.
Las
personas somos muy diversas unas de otras y no es justo asumir que
todos los que participan en una cultura de libertad sexual abordan
las cosas de la misma manera. Las ideas de las personas que se mueven
en el espectro de la sexualidad liberal se entrecruzan y no siempre
van en la misma dirección. Pero creo que tenemos que abrazar el
derecho de todos a ser una puta, un cornudo o un vicioso, incluso si
no estamos participando en ese elemento de no monogamia.
Escrito
por VIOLET
MICHELLE SMITH
Traducido
y adaptado por Cosas de los Cornudos